La economía actual basada en la quema masiva de combustibles fósiles se sostiene por los cientos de miles de millones de dólares, libras. yenes, euros, que anualmente recibe en forma de subvenciones. Dinero público de todos que hace posible que los negocios del petróleo, gas y carbón generen beneficios para los inversores sin conciencia. La gran mentira, la gran e innecesaria triquiñuela que prolonga la agonía de los seres humanos y de la vida en el planeta tal y como la conocemos.
Mecanismos regulatórios preestablecidos que alimentan la inercia de unas fórmulas de generación y consumo energético que mantienen, como siempre, a los que menos tienen alejados de la posibilidad de sumarse a los beneficios de la generación renovable de energía para escapar de la pobreza extrema. Y al resto sometidos a la tiranía de los grupos que controlan la extracción y distribución de los combustibles fósiles y a las consecuencias de la quema masiva del petróleo, gas y carbón para satisfacer todas las necesidades de transporte y energía.
Lo más penoso es que todo es una gran mentira. Pero hay esperanza. Hay muy buena gente que está propiciando el cambio. Muchos ocupan puestos de toma de decisión, algunos de ellos en empresas productoras de energía. Todos corroboran esta realidad que confirma “LA GRAN MENTIRA, CONVENIENTE QUE VIVIMOS” y que, de una vez por todas, podemos cambiar.
Los modelos sostenibles de alquiler de coche eléctrico, renting de coche eléctrico, son una de las numerosas fórmulas de contribución al desmontaje de los sistemas preestablecidos, del inmovilismo o de los lobbies energéticos.
Retiremos las subvenciones de petróleo, el gas y el carbón y la generación renovable de energía y el transporte sostenible sustituirá definitivamente a la economía del petróleo para poder adentrarnos en la era de la abundancia para todos, al fin y al cabo transformar los hábitos de venta del consumidor final, es un mecanismo razonablemente sencillo; esto es, gravar indirectamente la compra de vehículos con motor térmico , a través de las ayudas para la compra de vehículos eléctricos, o ayudas para la instalación de cargadores eléctricos. Tan sencillo , como efectivo.
En 2006 Laurie David, Lawrence Bender, Scott Z. Burns y Al Gore nos ayudaron a abrir un poco más los ojos con su película documental “An inconvenient Truth”, “Una verdad incómoda”, hacia los significados y consecuencias del calentamiento global.
Reafirmados ahora en la necesidad detener la quema masiva de combustibles fósiles descubrimos que hemos perdido otros diez años sumidos en “una gran mentira”… muy cómoda y conveniente, aparentemente, para algunos.
Es evidente que el uso y la comercialización de estas nuevas formas de transporte, los vehículos eléctricos hoy en el 2017, no son un pensamiento romántico, ni altruista, también son negocio, pero cualquier forma alternativa de consumo , más razonable, menos lesiva a nuestro entorno, merece la pena promocionarla y apostar por ella.